Los amigos de Jesús.

Jesús de Nazaret recorría las ciudades y aldeas de Palestina enseñando su mensaje. Lo acompañaban un grupo formado por los doce apóstoles y algunas mujeres.

Jesús, también tenía otros amigos, como Lázaro y sus hermanas Marta y María, que vivían en Betania, u pueblo cercano a Jerusalén.

Una vez que Jesús fue a visitarlos, María lo atendió, se sentó a su lado y escuchó su palabra. Mientras tanto, su hermana Marta hacía las tareas de la casa sin prestar atención a Jesús.

Entonces Jesús dijo "Marta, te preocupas por muchas cosas, cuando lo más importante es escuchar el mensaje de Dios y atender a las personas"

Una semana antes de ser crucificado, Jesús volvió a Betania a ver a Lázaro y a sus hermanas. Estando allí, le ofrecieron un banquete al que asistieron Lázaro y los apóstoles.

Cuando Marta atendía la mesa, se presentó María con un frasco de perfume muy caro, lavo los pies a Jesús y con sus cabellos se los seco.

Al ver estos gestos de María, Judas, el apóstol de Jesús, protesto diciendo "¿Por qué no se ha vendido ese perfume y se ha repartido el dinero a los pobres"

Judas no dijo esto porque le importaran los pobres, sino porque se encargaba de la bolsa del dinero y aprovechaba para robar.

Entonces, Jesús, contestó a Judas "A los pobres los tenéis siempre entre vosotros y los podéis ayudar cuando queráis. Sin embargo, a mi no me tendréis siempre, porque pronto moriré".

Después, una gran multitud de judíos acudió a ver a Jesús. Muchos de ellos creían en Él, porque había resucitado a Lázaro.